Me indigna asistir al nacimiento de otra exitosa serie de televisión que presenta al colectivo de profesores otra vez de forma impresentable. Vi el anuncio de la serie "Física o Química" y me temí lo peor y por eso, en mi afán de que crezca el sentido crítico de mis alumnos y alumnas, les dije que vieran la serie con lápiz y papel y que anotaran lo que les resultaba irreal, fuera de tono....
Cuando yo vi esa serie me quería morir:
-una profesora de filosofía que mantenía relaciones con un menor, primero sin saberlo (¿tonta?) y luego sabiéndolo (inmoral).
-una profesora de literatura que, aunque está "sobradamente preparada", tiene un miedo atroz al aula, pero que se serena cuando por fin puede enganchar a los alumnos-as haciendo un ejercicio utilizando un suceso dramático: el suicidio de un compañero. Y se ve cómo se relaja y y gana en seguridad (¿el fin justifica los medios?)
-un profesor de Educación Física que se cree dios y trata de solucionar un problema gravísimo en plan "colegas" (él, mejor que el psicólogo del centro, puede valorar las tendencias suicidas de un menor)
-Unos chavales que acosan a compañeros, los agreden, que se drogan en el centro, en los servicios......
-etc., etc.
La segunda puñalada me la dieron mis alumnos-as cuando hicieron su valoración: por supuesto, vieron todo aquello con una enorme normalidad. La profesora de filosofía, pobrecita, estaba enamorada, ella no tenía la culpa de nada....los chicos drogándose y pegándose también eran normales.....Dios mio! si vivimos en un estado casi policial.
Nos matamos trabajando y todo se queda en nada con esta hora de serie semanal.
En vez de poner una serie que dignifique nuestro trabajo, ahora que se nos respeta tan poco, nos vuelven a machacar.
Por favor, pidan alguna jornada de puertas abiertas en los centros educativos que tienen a su alrededor, visiten los institutos y colegios, y entiendan porqué sentimos estas series como una agresión